Faqs

En ningún caso la magnetoterapia es dolorosa. Durante las aplicaciones del tratamiento nunca se siente nada, lo único que pueden sentir es calor, por el efecto producido por el funcionamiento de la terapia electromagnética.

Esta terapia no es dañina, ni es tóxica. No existe ningún estudio que informe de efectos secundarios reconocidos, sino que es una terapia saludable y exitosa.

La magnetoterapia es una terapia en la que se observan los beneficios a medio y largo plazo. En las aplicaciones en partes grandes del cuerpo como el fémur o para fracturas de huesos más grandes y patologías en estado agudo su duración mínima es de 30 días. En cambio para terapias de partes más pequeñas como escafoides, muñeca o hallux valgus la duración mínima seria de 20 días. Nuestra recomendación es que el tratamiento dure al menos 30 días.

Para tener una rápida y buena recuperación en tus ciclos de sesiones, es recomendable tener sesiones de no menos de 2 horas consecutivas hasta un máximo de 8 horas. Esta información os la deberá proporcionar vuestro médico al que os prescribe este tratamiento. También hay programas que están programados con el tiempo necesario para cada tratamiento. De todas maneras si necesitan alguna indicación nuestro equipo les puede ayudar.

Recomendamos prestar especial atención a las indicaciones del manual de instrucciones que acompaña el fabricante de cada equipo de magnetoterapia. En general no se recomienda realizar más de una sesión diaria de tratamiento.

El tratamiento es capaz de llegar a partes del cuerpo muy profundas, incluso si todavía están vendadas o protegidas. Se deberá programar la máquina con una mayor potencia de emisión para generar un campo magnético más profundo. Nuestro equipo le puede ayudar a programarlo con más potencia de tratamiento si es necesario.

Para realizar una terapia efectiva y segura, el dispositivo ideal es una magnetoterapia de baja frecuencia CEMP, que está certificado por el Ministerio de Salud como dispositivo médico, además es de fácil uso y aplicación.

Es una de las terapias físicas que tienen un menor número de contraindicaciones, pero es cierto que supone un riesgo específico dependiendo de cada persona. A continuación os detallamos una lista de las contraindicaciones de la aplicación de la magnetoterapia:

– Todos los pacientes con marcapasos cardíaco u otros electroestimuladores permanentes.

– Pacientes con trastornos del ritmo cardíaco.

– Dermatitis e infecciones por hongos.

– Tendencia a la hemorragia.

– Patologías isquémicas graves.

– Durante el ciclo menstrual si es especialmente abundante.

– Se desaconseja utilizar esta terapia a mujeres embarazadas, en las personas con prótesis eléctricas y/o auditivas y dispositivos intrauterinos.

– Se recomienda no efectuar esta terapia contemporáneamente a TENS y/o HOLTER.

– No utilice el aparato en zonas con prótesis metálicas (tornillos, clavos, etc.) hechas de material ferromagnético y en zonas donde hay medios de síntesis endotisulares magnetizables. En caso de duda consulte con su médico.

– No es recomendable que utilicen los dispositivos en menores de 15 años.

– No utilice el aparato en personas con estados febriles.

– No utilice el aparato en órganos nobles (ovarios, corazón, cabeza, etc.)

– En caso de graves desequilibrios de la presión arterial.

– No utilice el aparato si padece tuberculosis.

– No utilizar en patologías tumorales.

Con la magnetoterapia es posible mejorar los procesos de regeneración ósea, contribuye a los procesos antiinflamatorios y acorta los procesos de rehabilitación. Hay múltiples patologías que mejoran con la Magnetoterapia entre ellas encontramos una amplia lista.

Con la magnetoterapia es posible mejorar los procesos de regeneración ósea, contribuye a los procesos antiinflamatorios y acorta los procesos de rehabilitación. Hay múltiples patologías que mejoran con la Magnetoterapia entre ellas encontramos una amplia lista.